domingo, 16 de junio de 2013

Quédate, Señor


Quédate, Señor,
que se hace ya tarde,
que el camino es largo
y el cansancio grande.

Quédate a decirnos
tus vivas palabras
que aquietan la mente
y encienden el alma.

Quédate, Señor,
que se hace ya tarde,
que el camino es largo
y el cansancio grande.

Pártenos el pan
de tu compañía,
ábrenos los ojos
de la fe dormida.

Quédate, Señor,
que se hace ya tarde,
que el camino es largo
y el cansancio grande.


V.M. Arbeloa